La marca Ford crea un circuito de conducción sobre nieve en la estación de Astún, situada a 2.000 metros de altitud, en un paraje excepcional del Pirineo aragonés.
En el circuito, pensado para los amantes de la conducción, la velocidad y la aventura, es posible hacer un curso para aprender los secretos de la conducción en superfícies nevadas.
Mediante la práctica de slaloms, derrapajes, frenadas con esquiva o arrancadas en condiciones de adherencia mínima, Ford y Astún ofrecen la posibilidad de vivir en primera persona esta experiencia única de conducción en nieve y hielo.